Ventajas y desventajas de las Mamografias
- Cancer es solo un sintoma

- 16 nov 2019
- 4 Min. de lectura
Cuando hablamos de la detención del cáncer, los médicos han ignorado con mucha frecuencia el hecho de que los pacientes tienen diferentes posturas y se centran exclusivamente en persuadir a las mujeres a hacerlas, en lugar de educar, para permitirles que decidan por sí mismas. Para poder elegir, se necesita una cuantificación de los riesgos y los beneficios que lo muestren de forma clara y accesible.
En un estudio se usaron mil mujeres, se escogieron de forma aleatorias y no se le hicieron mamografías, a otro grupo también aleatorias, si se les realizaron mamografías. Después de una década, al grupo que no se realizaron mamografías, aproximadamente 5 de las 1,000 murieron de cáncer de mama, lo que significa que aun sin pruebas de detección temprana las probabilidades de morir por cáncer de mama a las mujeres mayores de 50 años son menores del 1%. Pero por el otro lado, al grupo donde sí se realizaron mamografías con regularidad, en lugar de 5, solo 4 de cada 1,000 murieron de cáncer de mama y aunque la cantidad de mujeres que morirán en general parece ser la misma, las mamografías no salvan vidas en general. Pero quizás estos estudios no han tenido el poder estadístico suficiente para captar el beneficio de supervivencia general.
En término de daños, un centenar de mujeres que se habían hecho mamografías, recibirán falsas alarmas; y talvez tendrán que hacerse incluso una biopsia y probablemente ser sometidas a una lumpectomia o una mastectomía innecesarias. A esto le podemos sumar otro daño potencial, que podría ser contraer cáncer de mama inducido por la radiación de las mamografías. Estos datos no están incluidos, porque solo existen estimaciones indirectas y el riesgo es de solo 1 de cada 10,000 mujeres.
En un periodo de 20 años, de acuerdo a las recomendaciones actuales de los USPSTF (Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de los Estados Unidos) las mujeres deben hacerse un examen cada 2 años a partir de los 50 años, lo que uno esperaría 200 falsas alarmas durante esas dos décadas, pero solo alrededor de 30 terminarían en biopsia, algunos casos de cáncer no serían detectados, pero en cambio habrían 15 casos de sobrediagnostico y mujeres diagnosticadas y tratadas por cáncer de mama innecesariamente. Por otro lado, 2 muertes de cáncer de mama serian evitados gracias a las mamografías, aunque aparentemente no se habrían salvado vidas en general. Sin embargo, no todos están de acuerdo en estos números. Los números más optimistas que se pudieron encontrar es que por cada 1,000 mujeres examinadas, el beneficio es hasta 10 veces mayor, por hacerse mamografías cada año durante 25 años a partir de los 40 años, pero con un promedio de 3 falsas alarmas, cada uno, lo que nos da una posibilidad de 1 en cada 3mujeres de necesitar biopsias y alrededor de 1% de probabilidad de recibir un diagnóstico y tratamiento para el cáncer de mama innecesarios. Ahora bien estos números están basados en mujeres asintomáticas con un riesgo promedio. Para las mujeres con más riesgo, como las que hayan padecido cáncer de mama o tienen mutaciones del gen BRCA, se esperarían más beneficios, pero para la mujer promedio simplemente no hay una respuesta correcta.
Las mamografías, en general han mostrado resultados contradictorios. Hoy, no todos los expertos están de acuerdo sobre qué procedimientos de detección deben recomendarse al público, especialmente en mujeres más jóvenes que tienen menos de 50 años. En marzo de 2019, por primera vez en más de 20 años, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) propuso enmiendas a las regulaciones clave con respecto a la calidad y la seguridad de los servicios de mamografía y admitió, que aunque la mamografía puede ser la mejor prueba de detección de cáncer de mama, no encuentra todos los cánceres de mama, especialmente en pacientes con alta densidad de tejido mamario y los proveedores de atención médica deberán brindar más información sobre los riesgos asociados con mamas densas y otros factores que pueden dificultar la detección precisa del cáncer de mama.
Las mamografías se realizan para detectar el cáncer de mama y ayudar a confirmar un diagnóstico, pero no hacen nada para ayudar a prevenir o tratar el cáncer de mama. Hay docenas de opiniones diferentes disponibles hoy con respecto a la frecuencia con la que se realiza el examen, a partir de qué edad, y cuáles podrían ser los riesgos potenciales de varias opciones de examen. Para tomar una decisión informada, es importante comprender los beneficios, las limitaciones y los riesgos de todas sus opciones de detección. El USPSTF, publicó una recomendación revisada en 2009 que establece que las mujeres de 40 años NO necesariamente deben hacerse mamografías anuales, y deben sopesar cuidadosamente los riesgos teniendo en cuenta su situación personal. Esta recomendación entra en conflicto con las de la Sociedad Americana de Cáncer (ACS) y otros grupos autorizados, lo que deja a las mujeres inseguras de qué hacer para protegerse del cáncer. El Colegio Americano de Médicos también ha hecho recomendaciones similares al USPSTF junto a la Coalición Nacional contra el Cáncer de Mama, que ha advertido rutinariamente a las mujeres sobre las limitaciones y el potencial de daño que tienen las mamografías y señaló que el examen general en realidad puede ser dañino porque con frecuencia conduce a un sobrediagnóstico y sobretratamiento. También descubrieron que muchos grupos de defensa y sitios web a favor de las mamografías aceptaron el patrocinio de la industria de las mamografías sin restricciones. Esto da como resultado que ciertas organizaciones promuevan los beneficios de las mamografías sin revelar también los riesgos y los inconvenientes.
Cada mujer debería poder decidir si debe hacerse una mamografía o no y dejárseles tomar su propia decisión. Algunas pueden optar por seguir haciéndosela y valorar el potencial de beneficio que justifique los danos que la acompañan, otras pueden elegir no hacerlo pues lo beneficios no son suficientes para justificar los danos potenciales.
Independientemente de la decisión, podría ser mejor tratar de prevenirlo y recomendar alimentarse bien, hacer ejercicios. La detención se ha convertido en una forma fácil para establecida por los especialistas que es un método, con el que el paciente sienta y piense que está haciendo algo bueno por su salud, pero las pruebas de detención de cáncer no cambia el riesgo de contraerlo en primer lugar y esto no solo ocurre solo con el cáncer donde esos miles de millones gastados cada ano en programas de promover las mamografías podrían ser aprovechados salvando vidas en las mujeres a través de la alimentación.









Comentarios